Cuidar la piel durante tu embarazo

 cuidarse en el embarazo menorca farmacia pilar barrau Durante el embarazo es un momento muy especial para la mayoría de las              mujeres, pero también es un cambio físico y hormonal importante de su cuerpo      y piel que tenemos que tener muy en cuenta. Estos cambios conllevan entre          otros los siguientes:

    Acné: lo más habitual es que se produzca en los primeros momentos del   embarazo, especialmente en aquellas mujeres en las que la menstruación venía   precedida de la aparición de erupciones cutáneas en la cara. Sin embargo, en   algunas mujeres que ya tenían acné antes de quedar embarazadas, éste mejora    durante la gestación.

    Piel brillante: la piel adquiere un brillo especial durante el embarazo. Por un   lado, los cambios hormonales provocan que las glándulas sebáceas de   la piel produzcan más grasa. Por otro, se produce un aumento del flujo   sanguíneo en el epitelio, incrementando la oxigenación de las células cutáneas.

   

 

 

  • Estrías gravídicas: aparecen en la gran mayoría de las mujeres a consecuencia del estiramiento de la piel que se produce durante la gestación. En la mayoría de los casos surgen en el abdomen o en los senos, pero pueden hacerlo también en nalgas y caderas.

 

  • Manchas: también son frecuentes y pueden ser de diferentes tipos:
    • Línea negra: es una raya oscura que recorre de abajo a arriba la parte central del abdomen.
    • Piernas azuladas: es más frecuente en las zonas con clima frío y se caracteriza por una decoloración de la piel en algunas áreas de las piernas. Las manchas desaparecen después del parto.

 

  • Erupciones cutáneas: se producen como consecuencia del calor y a causa del sudor, que es más intenso durante el embarazo. También es frecuente que en la parte final de la gestación aparezcan erupciones con prurito en el abdomen, piernas y brazos, aunque no revisten ningún problema.
  • Palmas rojas: es característico del aumento de la concentración de estrógenos y también puede afectar a la planta de los pies. Puede producir picor.

 

  • Uñas y cabello: pueden crecer más rápido de lo habitual y son aparentemente más fuertes. También es posible que las uñas se vuelvan más quebradizas y blandas.

 

  • Manchas y cloasma: Durante la segunda mitad del embarazo el 70% de las mujeres (especialmente las de tez oscura) desarrollan manchas de tono marrón irregulares y difusas en la cara, llamadas cloasma o máscara del embarazo. Esta es una condición hereditaria y hormonal, pero el sol es el principal factor desencadenante. Las áreas más propensas son aquellas que están expuestas a los rayos solares directamente como pómulos, frente, nariz y barbilla. Lo mejor es prevenir las manchas usando protección solar sin alcohol. Y si ya te han salido, evita tomar el sol y use una protección total (SPF 50+). En muchos casos no pueden prevenirse, pero el protector solar ayuda a que no sean tan oscuras. Generalmente las manchas mejoran, y en la mayoría de los casos desaparecen después del parto.

Es imposible predecir qué cambios se producirán en la piel de cada mujer, aunque, en términos generales, algunos de ellos pueden prevenirse tomando una serie de precauciones desde el inicio del embarazo: hidratar la piel a diario con cremas, y especialmente el abdomen; evitar el calor y vestirse adecuadamente para soportarlo mejor (prendas amplias de algodón); no sobrepasar el peso recomendado y seguir una dieta equilibrada, aquí te dejamos algunos consejos para hacer que tu embarazo sea mucho más agradable

  • Higiene de la piel: Usa jabones neutros y cremosos. Los baños calientes no son recomendables. Es preferible la ducha, sin limitaciones de número pero sí de temperatura del agua.

 

  • Evita las estrías: las estrías son la consecuencia de lesiones que se producen en la parte más profunda de la piel, cuando las fibras de colágeno y elastina de la dermis se rompen. Aparecen más frecuentemente en vientre, senos, muslos, cara interna de los brazos, abdomen y caderas. Son casi inevitables, durante el embarazo del 70 al 90% de las mujeres las desarrollan, pero no comprometen la salud de la mujer ni el funcionamiento de su organismo. El comienzo de las estrías se caracteriza por la aparición de líneas rojizas muy finas y ligeramente elevadas que con el tiempo se transforman en líneas más gruesas. Pronto se deprimen y adquieren un tono violeta, que con los años se vuelve blanquecino y desaparece el vello de la piel sobre ellas. Tienden a aparecer en los últimos meses del embarazo cuando el crecimiento es máximo. Son irreversibles, de manera que es muy importante prevenirlas. Para ello te aconsejamos hidratar la piel: cuanto más elástica es la piel menos posibilidades hay de desarrollar estrías, por eso es importante la hidratación frecuente de las zonas más propensas a las estrías dando un masaje suave con cremas corporales hidratantes o específicas antiestrías para aumentar la circulación (dos veces al día).

 

  • Celulitis o piel de naranja: la celulitis es una alteración del tejido conjuntivo de la piel. Su manifestación más inmediata es la acumulación de grasa en diversas zonas del cuerpo, sobre todo en los glúteos, muslos y piernas durante el embarazo. Para prevenir este problema estético proponemos:
    • Dieta: no conviene engordar más de quince kilos durante el embarazo (excepto en embarazos múltiples). Además, es conveniente llevar una dieta sana y equilibrada: reducir la sal, no abusar de las comidas excesivamente grasas, ni de los dulces y beber abundante agua. 
    • Los masajes favorecen la circulación sanguínea, realice movimientos circulares ascendentes empezando por los pies hasta los muslos.   
    • Camina durante media hora a diario y realiza movimientos circulares con el pie, de izquierda a derecha.  
    • No es recomendable permanecer de pie o sentada durante mucho tiempo. Si tienes que estar de pie es mejor caminar, aunque sea tramos cortos. Si trabajas sentada, camina al menos una vez por hora, o levante y baje los talones periódicamente para activar la circulación de sus piernas.  
    • Evita la ropa ajustada, vista cómoda con prendas amplias y ligeras. 
    • Para favorecer la circulación es recomendable terminar el baño o ducha con un chorro de agua fría. No se recomiendan los baños excesivamente calientes.    
    • No es recomendable el uso de cremas anticelulíticas. Siempre consulta con su ginecólogo ante de comenzar cualquier tratamiento estético.   

 

  • Picores y ronchas en el embarazo: el estiramiento de la piel para amoldarse a las nuevas medidas produce, a veces, un picor en el abdomen y los senos. En ocasiones, las palmas de las manos y las plantas de los se enrojecen dando lugar a una pequeña comezón. Sin embargo un fuerte picor puede ser síntoma de un problema hepático conocido como colestasis intrahepática del embarazo. Es una dolencia que puede afectar gravemente al feto, por lo que a la mínima sospecha de padecerla es muy importante acudir al médico para que verifique o descarte esta patología con una análisis de sangre, ecografías y controles de monitorización al bebé. Un porcentaje pequeñísimo de gestantes sufre comezón en el abdomen como y consecuencia de la aparición de ronchas y manchas en la tripa en el tercer trimestre. Esta erupción cutánea se conoce como pápulas y placas pruriginosas y urticariformes del embarazo. A pesar de ese nombre, no te asustes, son inocuas para ti o para el feto. El médico te recetará una crema y un antihistamínico y, si es necesario, un tratamiento con esteroides. Normalmente la afección desaparece al dar a luz.

 

  • Cremas hidratantes: se recomienda hidratar todo el cuerpo, especialmente el abdomen, los senos y los muslos. Para evitar la irritación de la piel, usa una crema sin perfume y lávate sólo con jabón suave. Si notas la piel muy seca, usa productos untuosos tipo bálsamo, y si por el contrario se vuelve muy grasa, utiliza leche y productos libres de aceite.

 

  • Vello corporal: algunas mujeres desarrollan vello corporal durante el embarazo debido a los cambios hormonales. Es temporal desaparece algunos meses después del nacimiento del bebé. En otros casos, el vello se reduce por la acción de ciertas hormonas.

 

  • Pies en el embarazo: tus pies aguantan un peso adicional a diario, por lo que estarán más hinchados y seguramente necesites una talla más de lo habitual. Puedes aliviar la hinchazón descansando con ellos en alto, un paseo por la orilla del mar también te ayudarà a relajarlos.

Y recuerda, que vivir el embarazo es una de las experiencias mas bonitas que da la vida a la mujeres.

Cómo cuidar la piel de un bebé
Audición - Podcast -
 

Comentarios

No hay comentarios por el momento. Sé el primero en enviar un comentario.
Invitado
Sábado, 27 Abril 2024

Imagen Captcha

By accepting you will be accessing a service provided by a third-party external to http://farmapilucabarrau.es/